La seguridad de un domicilio se reduce al poder de una llave. Por ello hay que tener especial cuidado sobre cómo utilizamos los juegos de llaves del hogar y a quién se los confiamos. Para evitar posibles robos en el domicilio, es imprescindible seguir una serie de medidas de seguridad  que nos mantendrán en alerta.

A la hora de salir de casa, asegúrese que todas las ventanas y puertas estén cerradas. Cierre la puerta principal siempre usando la llave ya que si cierra sólo con el resbalón, será más fácil forzar la puerta y abrirla. Lo ideal sería contar con una puerta blindada ya que ofrece una mayor resistencia y seguridad. Si no la tiene instalada, procure que tenga como mínimo dos puntos de cierre y que no exista espacio entre la puerta y el suelo. También puede reforzar la parte de las bisagras con pivotes de acero para impedir que apalanquen la puerta para forzarla.

Aunque se considere una persona despistada, evite esconder el juego de llaves en buzones, felpudos, marcos de la puerta, macetas o cualquier lugar susceptible de ser visto.

Realiza un cambio de los bombines de la cerradura siempre que lo estimes oportuno. Si pierdes o te roban las llaves, si comienzas a vivir en una casa con un propietario anterior, cuando deje de trabajar algún servicio doméstico y en definitiva en cualquier situación en la que otras personas han tenido acceso a las llaves principales.
Cada vez existen técnicas más elaboradas para acceder a las viviendas ajenas, sin embargo, seguir estos consejos dificulta la acción y previene ser objeto de un posible robo